
El gobernador electo aseguró estar desmarcado de Rubén Moreira y que buscará consenso con la oposición, la cual quedó con el control del Congreso del Estado.
Por: Néstor González
Saltillo, Coahuila.-Â El gobernador electo de Coahuila, Miguel íngel Riquelme Solís, reiteró que buscará consensos para sacar adelante la problemática del estado de la mano del Congreso local, de mayoría de oposición, así como de los 38 municipios, particularmente en materia de seguridad durante el cambio de administraciones.
âHoy tiendo la mano para poder generar certidumbre en el cambio. Tendremos que tener directores de policía y un esquema de seguridad coordinado. Si no detiene su marcha el Gobierno, menos los municipiosâ, dijo Riquelme en su primera aparición ante medios locales de Saltillo luego de que el Tribunal Federal Electoral validara su triunfo en las elecciones del pasado 4 de junio.
Entre los cambios que se vislumbran, adelantó, está la creación de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado, que tendrá a su cargo los cuerpos policiacos que actualmente dependen de la Secretaría de Gobierno. El Gabinete será dado a conocer el próximo sábado 2 de diciembre, un día después de la toma de posesión.
Busca Riquelme la reconciliación
âYo he estado desmarcado (de Rubén Moreira Valdez) desde que inicié mi campaí±a (â¦) Hay muchos retos y me queda muy clara mi responsabilidad, pero aquí yo te digo que el que va a gobernar soy yoâ, expresó el gobernador electo Miguel Riquelme Solís al presentar algunos de sus proyectos de trabajo.
Precisamente destacó que comenzó a laborar en los compromisos de campaí±a, los cuales abarcan desde generación de empleos hasta la seguridad de la entidad, por lo que anunció la creación de la Secretaría de Seguridad Pública.
Trascendió que esta última tendrá bajo su cargo los cuerpos policiacos que actualmente dependen de la Secretaría de Gobierno.
El Gabinete, según el plan, será dado a conocer el próximo sábado 2 de diciembre, precisamente un día después de la toma de posesión del cargo.
A PUERTA ABIERTA
En el aspecto político, Riquelme Solís dijo que tendrá la puerta abierta para todos los coahuilenses, sin distingo de colores. âNo va a ser como dijo (Armando) Guadiana, que quería que nos reuniéramos el miércoles, pero sí me reuniré con ellos y con quienes tengan esa intenciónâ.
Apuntó que tenderá la mano incluso a aquellos que no lo respetaron, pues Coahuila necesita reconciliarse tras un largo y desgastante proceso electoral que se prolongó más de cinco meses después de la jornada electoral.
Riquelme Solís declaró que aunque por decisión propia no apareció ante los medios de comunicación durante el litigio, estuvo trabajando con los legisladores federales para gestionar un presupuesto que crecerá este aí±o de casi 43 mil millones de pesos, a casi 48 mil millones. Recalcó que mantendrá sus compromisos, como no crear nuevos impuestos ni volver a cobrar la tenencia.
âBuscaré los consensos para sacar adelante los intereses de nuestro estado, todos mis compromisos serán cumplidos, no me retracto de nadaâ.
En materia de deuda, seí±aló que habrá de buscar la mejoría de la calificación crediticia de la entidad con el fin de poder lograr mejores condiciones para el pago de ese débito.
âVoy a dar instrucciones al próximo secretario de Finanzas para la renegociación de la deuda con tasas de interés más bajas, así como acciones para mejorar la calificación crediticia para la renegociación de la deuda públicaâ.
FIEL A ACUERDOS
Respecto a la relación que habrá de llevar con un Congreso de oposición, manifestó que se tienen que llevar acuerdos e iniciativas ciudadanas con el fin de que sean aprobadas.
âTenemos la gran oportunidad de poner en práctica la habilidad política, por primera vez enfrentaremos un Congreso que no tiene mayoría, esto implica de parte del Ejecutivo enviar las propuestas correctasâ dijo.