
Se ha dicho que el trabajo duro triunfa sobre cualquier adversidad. Creyendo en eso, Pablo Romero Esquivel jamás dejó que su ceguera se interpusiera en su camino y lo convirtiera en âminusválidoâ.Â
Por: Alberto CázarezSuper Channel 22 entrevistó al conocido músico nigropetense Pablo Romero Esquivel, quien se dedica a la música como profesión desde  hace ya 37 aí±os.
Si frecuentas restaurantes y bares de la ciudad, es muy probable que hayas tenido la oportunidad de escuchar la música de Pablo, pues él se gana la vida tocando en estos establecimientos. Lo que hace a Pablo tan especial no es su habilidad para tocar la guitarra de manera espléndida a pesar de su ceguera, sino el hecho de que si pones atención, notarás un hecho llamativo por lo raro que es en nuestra región para alguien con su discapacidad: Pablo viaja solo y es completamente independiente.
Pablo bajándose de un taxi para llegar a tocar a un restaurante; Pablo caminando por el centro de la ciudad, navegando sin problemas entre un mar de autos; Pablo saliendo de la tienda después de comprar las cosas necesarias para su hogar. Actos que parecerán mundanos para aquellos con sus cinco sentidos, pero que para una persona sin la vista parecieran retos insalvables.
¿Cómo fue, entonces, que este talentoso músico logró sobreponerse a las pruebas que la vida le puso?
âEstudié en una escuela para invidentes en Monterrey. En esa escuela, además de primaria, los estudiantes tomaban clases sobre orientación y movilidadâ.- Declaró Pablo Romero.
âEn la Zona Centro normalmente me muevo a pie, para ello cuento las calles y así sé siempre en donde estoy. Por ejemplo aquí estamos en la calle Matamoros entre las calles Morelos y Padre de las Casas. Cuando tomo autobús me apoyo con los choferes. Y para evitar caerme en algo pues camino despacio y uso mi bastónâ.- Explicó.
Pablo compartió con nosotros que aprendió música a través de su hermano y de sus propias amistades.
Finalmente, pidió que se apoye a las personas invidentes ya que ellos se enfrentan a una situación difícil ya que si los videntes consideran que la vida es dura, para una persona sin acceso a la vista lo es todavía más.