Torreón ha sido testigo de gobiernos marcados por la corrupción, pero nunca por la represión. Sin embargo, las recientes acciones del alcalde Román Cepeda González rompen cualquier esquema.
La clausura de dos espectaculares del grupo radiofónico Horizonte Lagunero, tras la difusión de investigaciones periodísticas que exponen actos de corrupción en su administración, es un claro indicio de censura y un atentado contra la libertad de expresión .
Estas medidas, carentes de justificación oficial, evocan prácticas autoritarias que creíamos superadas. En una ciudad donde la crítica ea parte esencial del desarrollo democrático, silenciar voces disidentes no solo es un retroceso, también representa una amenaza a los principios fundamentales de nuestra sociedad.
Represión, respuesta a la crítica
Ante la evidente censura del gobierno municipal de Torreón a la libertad de expresión, es imperativo que las autoridades municipales respeten y protejan la libertad de prensa. La censura no puede ser la respuesta a la crítica; al contrario, debe ser un incentivo para la transparencia y la rendición de cuentas.
Torreón merece un gobierno que enfrente las acusaciones con hechos y no con represalias.
La comunidad lagunera debe permanecer vigilante y exigir que se respeten los derechos fundamentales. La historia de Torreón no debe mancharse con actos de represión, ¿o sí?
Muy madrugadores
Este domingo, cuando la mayoría apenas despierte para decidir si prefiere barbacoa o menudo, los consejeros del Instituto Electoral de Coahuila ya estarán entonando el Himno Nacional en la explanada del edificio sede. A las 6:15 de la mañana, con el primer gallo, arrancará formalmente la jornada del Proceso Judicial Electoral Extraordinario 2024–2025, bajo la batuta de Óscar Daniel Rodríguez Fuentes.
Más allá del simbolismo patrio, el mensaje es claro: en Coahuila la elección judicial no se tomó a la ligera y por lo visto hay todo un protocolo para garantizar que el relevo o ratificación de jueces y magistrados transcurra sin contratiempos.
Con el acordeón
Los operadores de la ‘Cuatroté’ en Coahuila dejaron de lado toda simulación y se lanzaron de lleno a promover los famosos “acordeones” entre los electores. La línea bajo directa desde la diligencia nacional, o bueno, mejor dicho desde la oficina, del heredero Andrés Manuel López Beltrán, que instrucciones para que este domingo se vote por jueces, magistrados y ministros que resulten más cómodos para la causa guinda.
Lejos de guardar las formas o fingir un mínimo de respeto por el espíritu de la ley, los morenistas locales se alinearon sin regateos.
Burda operación
Con Diego del Bosque Villarreal -para más señas dirigente de morena en Coahuila- a la cabeza, acompañado de legisladores locales, federales y no pocos servidores públicos, incluidos los autollamados “servidores de la nación”, le entraron con ganas al reparto de instructivos que, sin rubor alguno, orientan al votante sobre a quién marcar en las boletas. Una operación burda, pero efectiva, donde la legalidad se reduce a nada frente a los intereses de la cúpula que pretende hacerse del Poder Judicial.
dsgf
