Por Grupo Zócalo
Tijuana, Baja California.- La mañana del 19 de octubre la policía Dalia Suzeth salió de su casa en Tijuana, Baja California, para dejar a su hija a la escuela, pero apenas subieron a su auto tres personas abordo de otro vehículo les bloquearon el paso y le dispararon a la oficial mientras su hija observaba todo desde el asiento trasero; dos semanas más tarde se confirmó la detención de uno de sus asesinos.
De acuerdo con información de la Fuerza Estatal de Seguridad Ciudadana (FESC), la persona detenida responde al nombre de Luis Felipe “N”, un joven de 20 años que las investigaciones apuntan a que sería la persona que baja del vehículo y dispara contra la oficial de la misma corporación.
Al momento de su detención Luis Felipe “N”, alias “El Morral” tenía consigo varias dosis de distintas drogas, por lo que se presume que también se dedicaba a su venta al menudeo, informó la FESC.
Conviene recordar que aunque fueron cuatro las personas que aparecen en varios videos esperando afuera de la casa de la agente hasta que reciben una llamada que presuntamente les da la orden de actuar, aún falta saber quién es la persona detrás del asesinato, toda vez que el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) se adjudicó el ataque.
“Ahí está tu agente por pasada de (...) Te vamos a encontrar”, se leía en un mensaje dejado un día después del asesinato de la policía de Tijuana y dirigido al comandante de la FESC, José Heriberto González: “Pepillo, te quedó grande la silla. Vamos a buscarte por cielo , mar y tierra y de perdida herido vas a quedar”, cerraba el mensaje firmado por “El Sr. Mencho”.
Espiaron por dos días a Dalia Suzeth
Al aparecer en la escena el CJNG se recordó que la casa del comandante de la FESC de Tijuana fue baleada a unas semanas de asumir el cargo en agosto pasado; en ese momento se responsabilizó a “Los Erres”, un grupo armado de la organización liderada por El Mencho en Baja California y quienes afirmaron que Heriberto González recibió 100 mil dólares de una organización rival para entregarlos al secretario de Seguridad Estatal, Leopold Tizoc Aguilar Durán.
Las investigaciones de la FESC también apuntaron a que las cuatro personas a bordo del automóvil que después abandonaron en la huida espiaron a Dalia Suzeth por al menos dos días.
Grabaciones de cámaras de seguridad pudieron reconocerlos mientras seguían a la policía de Tijuana en su domicilio de la Calle Miel en el Fraccionamiento Las Abejas para después trasladarse a un hotel de la zona donde se hospedaron hasta el día del crimen.
Las pesquisas también arrojaron que la agente participó en diversos operativos de la FESC que terminaron en el desmantelamiento de un laboratorio para fabricar fentanilo, el aseguramiento de más de 20 armas largas y la detención de presuntos criminales vinculados al Cártel de Sinaloa, Cártel de los Arellano Félix y al CJNG.
Protestan policías de Tijuana
Después del asesinato de la policía frente a su hija, varios uniformados de Tijuana comenzaron a trabajar bajo protesta y reclamaron al titular de la Secretaría de Seguridad el Estado (SSE), Leopoldo Tizoc Aguilar por el incremento de la violencia contra los oficiales municipales y estatales.
“No eres digno del personal que diriges”, se leía en parte del comunicado que hicieron girar por las condiciones en que trabajan; además le hicieron notar su “falta de empatía” y protocolos para cuidar a su personal, pues señalaron que Dalia Suzeth había participado días antes en la detención de un peligroso criminal a quien entregó al Ministerio Público.
Versiones extraoficiales refieren que el “peligroso criminal” al que se refieren los policías de Tijuana es Héctor Manuel Gil García, alias El Kado”, líder de una célula de los Arellano Félix con operaciones en el Valle de Guadalupe.
Con información de Infobae
IZN
