Por: El Universal
El número de muertos aumentó a 250 israelíes el sábado por la noche y más de mil 500 heridos, mientras que la Media Luna Roja Palestina cifraba en más de 250 muertos y unos mil 700 palestinos heridos.
La Media Luna Roja Palestina Árabe añadía que hay una grave escasez de reservas de combustible necesarias para el funcionamiento de los hospitales.
En un discurso televisado el sábado por la noche, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, quien anteriormente había declarado que Israel estaba en guerra, dijo que el ejército utilizará todas sus fuerzas para destruir las capacidades de Hamás. Pero advirtió: “Esta guerra llevará tiempo. Será difícil."
Por la madrugada, el ejército israelí ha informado de que sus fuerzas están lanzando ataques contra objetivos pertenecientes al grupo islamista palestino Hamas en la Franja de Gaza, sin proporcionar más detalles.
Previamente, el gabinete de seguridad de Israel manifestó que ha tomado una serie de "decisiones operativas destinadas a provocar la destrucción de las capacidades militares y gubernamentales" de Hamas, que el sábado llevó a cabo un ataque sin precedentes desde la Franja de Gaza contra territorio israelí.
Entre las decisiones tomadas por el gabinete se encuentra detener el suministro de electricidad, combustible y bienes a la Franja de Gaza.
La primera fase de la guerra, escribe Netanyahu, implica “destruir la mayoría de las fuerzas enemigas” que se han infiltrado en Israel y han matado a civiles y soldados.
Israel ha comenzado una ofensiva en Gaza “y la continuará sin vacilación y sin tregua, hasta que se logren los objetivos”, manifestó.
Por otra parte, un portavoz militar israelí emitió un mensaje en árabe dirigido a los residentes de la Franja de Gaza para que busquen refugio ante la respuesta israelí, que ya está en curso.
El portavoz militar dijo a los residentes de Gaza que “las operaciones de Hamas están obligando al Ejército de Israel a operar en su lugar de residencia. Por su seguridad, debe abandonarlo inmediatamente”.
Asimismo, el comandante de la Policía de Fronteras israelí, Amir Cohen, elogió a las fuerzas de seguridad que recuperaron el control de una comisaría de policía de la ciudad de Sderot, próxima a Gaza, que fue asaltada el sábado por elementos de Hamás, tras una operación de varias horas para expulsarlos.
Según se anunció oficialmente, al menos diez miembros del grupo islamista palestino murieron en la operación.
Cohen indicó que se han dado instrucciones para que los residentes en las áreas próximas a la Franja de Gaza permanezcan en el interior de sus casas, no salgan y llamen a los servicios de emergencia si necesitan ayuda.
Varios ciudadanos israelíes que permanecían como rehenes de los milicianos de Hamas en una casa de la localidad de Ofakim, en la frontera con Gaza, fueron rescatados y sus captores muertos por tropas israelíes, tres de cuyos efectivos resultaron heridos en la operación, que se prolongó durante toda la jornada de sábado y las primeras horas del domingo, informaron medios de Israel.
