
Los fanáticos están invitando a Dios a interceder en mantener a Trump en el poder.
Por La Jornada
Estados Unidos.- Los 16 electores del estado de Michigan serán escoltados por agentes de seguridad armados cuando lleguen este lunes al capitolio de su estado para emitir sus votos en el Colegio Electoral y con ello constatar que el demócrata Joe Biden es el próximo presidente en lo que determinará formal y oficialmente que Donald Trump perdió.
La tensión ante amenazas de violencia contra los llamados âelectoresâ, funcionarios electorales en varios estados e incidentes sangrientos con por lo menos 4 acuchillados y un herido de bala en la capital del país y en Olympia, Washington el fin de semana, es producto directo de la incitación de Donald Trump a luchar contra una elección ârobadaâ por un magno fraude a pesar de que decenas de tribunales incluso la Suprema Corte el pasado viernes y su propio procurador general William Barr han rechazado por falta de pruebas.
âEsto no ha acabadoâ, afirmó Trump, quien criticó la falta de âvalentía y sabiduríaâ de la Suprema Corte (donde él instalo a tres de los seis jueces conservadores) y atacó a gobernadores y legisladores estatales republicanos en estados claves como Georgia y Arizona que no cedieron ante su demanda de anular el voto de sus propios ciudadanos. En una entrevista con Fox News este fin de semana Trump fue preguntado si le preocupaba dividir al país, Trump respondió que âno, me preocupa que el país podría tener un presidente ilegítimoâ¦â
https://youtu.be/1JsbK4KmTIQDespués de que la Suprema Corte rechazó la demanda de Texas apoyada por 17 otros procuradores estatales y más de 126 legisladores federales republicanos para revocar los resultados en cuatro estados claves y con ello rescatar de la derrota a Trump en la elección nacional, ahora los fanáticos están invitando a Dios a interceder en mantener a Trump en el poder.
El sábado en Washington, al igual que en varias otras ciudades, miles de fanáticos de Trump -impulsados por criminales condenados como el ex asesor de Seguridad Nacional de Trump, el general Michael Flynn- ahora libre bajo indulto presidencial (quien recientemente propuso que el presidente declarara âley marcial parcialâ para revertir la elección), encabezados por reverendos y más oraron para que Dios interviniera para mantener a su líder en la Casa Blanca otros cuatro aí±os.
Pero también estaban dispuestos a intimidar, provocar golpes y otras formas de violencia, y portar armas. Quemando mantas de Black Lives Matter e intimando a ciudadanos en autos solo porque llevaban puestos cubrebocas, cientos de Proud Boys, organización neofascista encabezada por el cubanoestadunidense Enrique Tarrio, se sumaron a los miles que llegaron a Washington el sábado para mostrar su lealtad a su líder y apoyarlo en su destrucción del proceso democrático. Se reportaron algunos arrestos y por lo menos cuatro casos de gente acuchillada.
Hubo un herido por balas en Olympia, Washington en otro enfrentamiento entre agrupaciones ultraderechistas y manifestantes anti-Trump. Se espera más.
Y continúan las amenazas, incluyendo algunas de muerte, contra poltíicos y funcionarios republicanos que certificaron el voto en sus estados y no âayudaronâ a Trump, con sus nombres, fotos y direcciones de sus hogares en âlistas de enemigosâ o de âtraidoresâ circulando en redes sociales.