
La fiesta brava de luto, nuevamente.
Por FRANCISCO VARGAS M.
Aguascalientes.- Nuevamente en la fiesta brava de nuestro país y en especial de nuestro querido Aguascalientes, se encuentra de luto y cuelga un crespón negro en ella, por el lamentable fallecimiento del que fuera novillero, Raúl Guedemín Victoria, quien dejó de existir la madrugada de este domingo 8 de noviembre a la edad de 66 aí±os, en su domicilio de esta ciudad capital.

Así se dio a conocer, el pasado miércoles de este mes, Raúl empezó a sentirse mal, por lo que se le empezó aplicar oxígeno, se le hicieron los exámenes correspondientes dando positivo a coronavirus, por lo inmediatamente comenzaron a atenderlo, teniendo una mejoría; pero el pasado sábado, empeoró su salud y en la madrugada del domingo vino el lamentable deceso a las 03:00 horas.
Raúl Guedimín Victoria, mejor conocido como âRuloâ, perteneció a la importante y gran âDinastía Pastorâ. Hijo del torero Víctor Pastor y hermano del reconocido cronista taurino Julio y de los matadores de toros Víctor, César, y tío de los también diestros Víctor y José María Pastor.
Nació el 9 de marzo de 1954 en la Ciudad de México y se presentó en la Plaza México, el 2 de septiembre de 1979 donde compartió el cartel con Paco Olivera
âBombitaâ y Gerardo Montejano, con el novillo de nombre âíbanoâ de la ganadería de Zotoluca.
Después de dejar de calzarse el terno de luces, nunca se alejó de la fiesta brava, ya que gustaba por acompaí±ar a sus hermanos como sobrinos, haciendo en varias ocasiones la función de mozo de espadas con ellos; como también asistiendo a festejos taurinos, tanto en Aguascalientes y en diferentes plazas del país.
Su cuerpo fue cremado y sus cenizas serán depositadas en la cripta familiar, existiendo la posibilidad de que sea también en la ganadería de San José de Buenavista, ya que fue una de sus peticiones en vida.
Desde este espacio todos los que formamos parte de este importante medio, enviamos nuestras más sinceras condolencias y un fraternal abrazo a sus hermanos Víctor, César, Pili, Lourdes, Consuelo, Fernando, Juan Antonio, Julia y Cecilia; como a sus sobrinos Víctor, José María y a todos sus familiares.
Amigo âRuloâ, mucho se te extraí±ará, quedan tatuados en la mente, todos esos agradables momentos y amenas charlas que durante muchos aí±os compartimos. ¡Descansa en Paz!