
¿El oso te tiene más miedo a ti que tú a él? No estamos seguros...
Por: AgenciasCanadá.- Richard Wesley, de Ontario, Canadá, debe de ser una de estas personas que, al llegar al fin de semana, se despierta inevitablemente a la misma hora a la que cada día le suena el despertador de lunes a viernes. El síndrome del jubilado, lo llaman.
El caso es que este tipo de madrugadores forzosos de fin de semana se suelen encontrar tremendamente aburridos antes de que las panaderías estén abiertas, y este exceso de tiempo libre puede llevarles a tomar decisiones cuestionables, como poner el canal de teletienda y acabar comprando un juego de cuchillos, una piscina hinchable y una mesita-bandeja para poder cenar en el sofá, o pillar un arco y unas flechas de cuestionable calidad y tirarte al monte a ver si cazas algo y quedar como un machote.
Lo más probale es que al pobre Wesley ya no le quedase más basura que comprar en la teletienda, por lo que tuvo que decantarse por la opción B.
Richard se acercó a cazar a la zona de Fire River cuando ve en la distancia a un enorme oso negro. Al ver que se acerca, Wesley empieza a hacer sonidos para espantarlo, pero consigue justamente el efecto contrario, atraerlo hasta que finalmente carga contra él. "Tendría que haber disparado mucho tiempo antes", dice a cámara justo después del ataque.
Por lo que ha explicado en un comentario de YouTube, "no hay más heridas que un codo amoratado y el ego donde el oso me tiró al suelo".
Aunque no tengamos evidencias de ello, por aquí estamos bastante seguros de que este hombre debe de ser el primo del tipo que creyó que era una buena idea perseguir a un león con la ventanilla del coche bajada.