
El representante del gobierno venezolano rechazó cualquier consejo y se negó a reconocer las peticiones de llevar a cabos elecciones libres y de liberar a presos políticos.
Por: Reforma
Ciudad de México.-Â En la sesión de ayer de la Organización de Estados Americanos (OEA) sobre la crisis en Venezuela los estados miembros se hicieron de palabras.
La escala verbal fue tal que México se paró de la sesión luego de que el representante permanente de Venezuela ante la OEA, Samuel Moncada, insultara a varios de los países miembro, incluyendo al país.
âHoy se demostró en la OEA que se ha consumado un acto de intervencionismo en Venezuela violatorio al derecho internacionalâ, dijo Moncada, y acusó al organismo de pretender obligar al Gobierno a âviolar su Constituciónâ.
âDe Brasil no puedo decir mucho porque ahí no hay Gobierno electo, hubo golpe de estado y no puedo respetar su opinión. Dentro de México suceden cosas mucho más graves de las que se están discutiendo aquí. Venezuela necesita de la OEA como México necesita del muroâ, atacó.
âAl pueblo colombiano le decimos que siempre hemos actuado con discreción ayudando su proceso de paz y con esa terrible guerra que han tenido, nunca hemos venido a denunciarlos. ¿Cómo es posible que Colombia diga que en Venezuela hay una crisis y que nos quiere ayudar? Si Colombia quiere ayudar a Venezuela, pare de producir cocaínaâ, indicó.
México lanzó un ultimátum.
âSi el orador de Venezuela continúa faltando respeto en esta reunión, nos veremos en la obligación de retirarnosâ, amenazó Luis Alfonso de Alba, el embajador del país ante la OEA.
Unos minutos después, luego de que Estados Unidos también pidiera que se le llamara la atención a Moncada, De Alba se levantó de la sesión, quien se le atribuye el liderazgo del llamado âgrupo de los 15â, países que firmaron el documento en el que convocaron a la reunión y establecieron una serie de peticiones al Gobierno de Maduro.