Ciudad de México.- Con el próximo arribo del republicano Donald Trump a la Casa Blanca, por segunda vez, la agenda comercial de Estados Unidos con México tendría continuidad, afianzada por el T-MEC y su próxima revisión, y aunque sus constantes amenazas arancelarias obligan a estar en alerta y habría algunos efectos en el corto plazo, para algunos analistas la certeza es lo más importante.
Al respecto, Larry Rubin, presidente de The American Society, dijo que debido al triunfo de Donald Trump en las elecciones de este 5 de noviembre y las recientes reformas constitucionales que se realizan en México, es muy probable una renegociación del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
Aseguró que seguirá el acuerdo comercial porque fue un instrumento que impulsó Trump, pero que se renegociará por las tres partes, lo que no solamente tiene que ver con el regreso del republicano a la Presidencia estadunidense sino con el entorno en México.
“¿…Los fundamentales en México cambiaron con la reforma al Poder Judicial, lo que va a requerir un esfuerzo constante del Gobierno mexicano para establecer condiciones más favorables para los inversionistas estadunidenses”, dijo Rubin.
Reiteró que Trump impulsó el T-MEC como un auténtico motor de la economía de América del Norte, pero advirtió que lo más importante es que ambos gobiernos actúen “siempre apegados al marco de condiciones de certeza jurídica y reglas comerciales claras”.
Se mantendría statu quo
Por su parte, el presidente de la Asociación de Bancos de México (ABM), Julio Carranza, dijo que luego de la victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales de Estados Unidos se mantendrá la relación con México en materia comercial, que se deberá de buscar fortalecer junto con Canadá mediante el T-MEC.
“Son momentos en los que hay que ver cómo vamos a tener esta nueva relación entre nuestra Presidenta, que bien ha dicho que estamos listos para trabajar con cualquier gobierno. Lo dijo inclusive antes de las elecciones del martes y seguramente que ahora lo va a sostener y va a buscar que la relación entre México y Estados Unidos siga siendo fructífera, como lo ha sido para los dos países”, destacó.
Resaltó que el resultado electoral en Estados Unidos no afecta la relación con México, a pesar de las declaraciones que realizó el republicano Trump durante su campaña electoral.
Sobre el aspecto comercial, resaltó que la otra oportunidad para México también puede darse si Estados Unidos continúa con una restricción comercial para China, pues esto abre la puerta para nuevas inversiones o áreas de negocio.
En ese sentido, comentó que el T-MEC no sólo está ayudando a la economía mexicana, ya que es un acuerdo comercial que beneficia a tres países que en conjunto representan 28% del comercio mundial.
“Esto es una gran oportunidad para México y la vamos a seguir aprovechando; la banca está lista para seguir apoyando, seguimos con más de 1.2 billones de pesos listos para prestar y apoyar todos los proyectos de infraestructura”, dijo.
Carranza agregó que la volatilidad en el tipo de cambio se trata de un movimiento normal en la economía y no descartó que continúe en tanto no se establezcan formalmente los nuevos gobiernos de México y Estados Unidos hacia los próximos meses y que se normalice hacia 2025.
Amenazas, con seriedad
En cuanto a las amenazas del ahora ganador de la Presidencia de Estados Unidos, la exembajadora Martha Bárcena dijo que deben de tomarse con seriedad porque pueden ser una realidad y no solamente promesas de campaña.
En una serie de mensajes en la red social X, quien fuera embajadora de México en Estados Unidos dijo que las “posibles implicaciones para México en tiempos y urgencia de la elección de Donald Trump: Hay que tomarse en serio las amenazas y promesas de Trump. No sólo es retórica de campaña”.
Por ejemplo, está “la amenaza más inminente del cierre de la frontera el primer día de la presidencia de Trump”, lo que afectará a 3 millones de dólares que cada minuto cruzan la frontera.
Está también la declaración de Trump de que no revisará el tratado, lo renegociará e impondrá aranceles de 25%, por cuestiones de migración y tráfico de fentanilo. Agregó que “el discurso de Trump sobre migración fue fundamental en su triunfo. Cumplirá hasta donde prácticamente pueda, su amenaza de redadas y deportaciones masivas. La opinión pública lo respalda”, lo que implica enormes retos para México.
Con certeza, se fortalecerá relación
Para el presidente del Consejo de Administración de Banorte, Carlos Hank González, con la victoria de Donald Trump ya hay certeza de lo que va a venir y México puede fortalecer la relación comercial en Norteamérica
“Ya hay certeza de lo que viene en el futuro y los mercados lo están sintiendo de esta manera que se tengan oportunidades de seguir creciendo”, aseguró el directivo.
Enfatizó que la posición geográfica de México con la economía más grande del mundo abre una oportunidad para seguir construyendo infraestructura e impulsar el crecimiento.
“Hemos logrado hacer una sociedad comercial extraordinaria y México es un aliado y lo que puede contribuir al desarrollo de Norteamérica es extraordinario. Claro que hay retos, en infraestructura, energía, pero todo crecimiento trae esos retos y eso es lo que nos entusiasma”, dijo.
El presidente del Consejo del segundo grupo bancarios más grande que opera en México comentó que el país vivirá en el corto plazo una etapa de amplio crecimiento con lo que Banorte busca financiar los proyectos que se generen en las diversas zonas del país.
“Estamos viviendo en una época de mucho crecimiento y una enorme integración ya sólida entre Estados Unidos y México y la oportunidad que tenemos con el nearshoring es extraordinaria y queremos ser los aliados en esta oportunidad para apoyar a los clientes y a México para construir la infraestructura y lo que se requiera para maximizar y capitalizar esa oportunidad”, dijo.
En tanto, Gabriela Siller, directora de Análisis Económico de Grupo Financiero Base, señaló que con el virtual triunfo del republicano, en México los efectos en comercio exterior tendrán un impacto prácticamente inmediato.
“En el mediano y largo plazo yo veo un panorama menos retador con Trump que con Harris, porque Trump, si quiere seguir con una guerra comercial muy dura con China, necesita un aliado comercial, que es México. “Económicamente para México, en el corto plazo Trump puede ser un reto, porque es un negociador muy duro y llega gritando”, comentó.
Para la especialista, ahora es necesario que México no sólo apueste por mantener la relación comercial con Estados Unidos, sino fortalecer el bloque económico para mantener el dinamismo de las exportaciones.
De acuerdo con datos del Departamento de Comercio de Estados Unidos publicados el martes, sólo en septiembre se importaron desde México mercancías por un valor de 44 mil 155 millones de dólares, lo que representó 56% del total de las compras estadunidenses en la región de Norteamérica.
jacl