Piedras Negras, Coahuila.- Autoridades federales iniciaron durante este fin de semana una serie de operativos para frenar el tráfico humano de indocumentados por la frontera, acotando el paso a las bandas de polleros que envían a migrantes a Estados Unidos, desde ejidos como El Centinela, La Navaja, San Isidro y El Moral.
Con el operativo se instalaron puntos de revisión en las entradas y brechas de estos ejidos para detectar el tráfico de indocumentados, luego de que las autoridades de la Patrulla Fronteriza reportan semana a semana que un promedio semanal de mil 600 a 2 mil extranjeros son procesados en el sector Del Río, tras cruzar por Normandy y El Quemado, en Texas, sitios que colindan con los ejidos del lado mexicano.
Fuertemente armados, incluso con rifles calibre 50, los militares instalaron los retenes en donde revisan a camiones, automóviles y todo vehículo que entra o sale de ese sector, esto para descartar que haya el ingreso de indocumentados a la zona fronteriza.
Las bandas de polleros se han apoderado de estos ejidos, ya que se asegura que cuentan con casas de seguridad en los ranchos, donde los ocultan para aprovechar los cambios de turno de la Patrulla Fronteriza, y que crucen el río Bravo y se entreguen para solicitar asilo.
Va Sedena contra 12 traficantes
La Sedena reitera que el tráfico humano fronterizo en esta región está liderado por 12 traficantes, siete ya identificados como: “El Gallo”, “El Sacerdote”, “El Venus”, “Doña Mary” de Monclova, “El Samuray”, “El Arturo” y “El Meño”, quienes trafican migrantes por PN y Acuña.
JACL
