Por FRANCISCO VARGAS M.
En lo que fue la Primera Corrida del Serial Taurino, celebrada este domingo 14 de abril, hubo un triunfo compartido entre el matador madrileño Fernando Robleño y el aguascalentense Juan Pablo Sánchez, quienes cortaron una oreja respectivamente; mientras que el también diestro acalitano Miguel Aguilar tuvo una actuación de gran entrega y disposición.
Con poco más de media entrada en la Plaza Monumental, y tarde calurosa, se jugó un encierro entipado de la ganadería queretana de Barralva, encaste mexicano, de comportamiento desigual y que cumplió en varas. Primero, noble con fuerza medida; segundo, noble, viniéndose pronto a menos; tercero, sin ritmo y descompasado, pitos en el arrastre; cuarto, soso y deslucido; quinto, noble con poca fuerza; sexto, manso.
FERNANDO ROBLEÑO (Azul Marino y Oro)
Su primero fue “Mi Pepe”, negro vuelto de cornamenta al que lanceó a la verónica de buena manera cerrando
con media. Con torería y empaque, inició con pases de la firma y pecho, ante un toro que claudicó a la arena en el remate. Al ver la poca fuerza del astado a base de consentirlo y no exigirle le fue sacó pases por el derecho, mientras que por el izquierdo aguantando las cortas embestidas trazó meritorios naturales tersos y templados. Continuó por el derecho logrando pases de firmeza, concluyendo con pases uno a uno y otros más dándole los terrenos de adentro. Dos pinchazos y estocada trasera atravesada, para recibir palmas.
con su segundo” Cortinero”, lo recibió de hinojos con una larga cambiada y verónicas jugando los brazos y dos medias para escuchar diana. Por bajo inició su faena con gran torería intercalando sabroso trincherazo de la firma y pecho. Con toro más potable vinieron series por el derecho con pases que tuvieron eco en el tendido a pesar de las sosas embestidas del astado. Por el izquierdo estuvo con empeño intercalado adorno del desdén y posteriormente toreo por el derecho en redondo figura erguida, adornándose con la girondina. Estocada casi entera que surtió efectos para petición de oreja que le fue concedida por parte del juez César Pastor.
JUAN PABLO SÁNCHEZ (Rosa Mexicano y Oro)
A “Chalao”, lo bregó para fijarlo a su capote y después de un breve puyazo de Omar Morales, quitó
vistosamente por caleserinas, recibiendo una diana. Con reciedumbre comenzó por bajo con doblones viniendo enseguida series por el derecho de gran firmeza, ligando los pases a base de dejarle la sarga en la cara al astifino astado. Se pasó la muleta a su mano izquierda trazando naturales lentos como fueron los derechazos sin apretar al burel que pronto se vino a menos, toreando para el astado, intercalado adornos como fueron dosantinas. Pinchazo, otro hondo, dos golpes de descabello y palmas de aliento.
El quinto de la tarde fue “Almudeno”, mismo que embistió con poca fuerza por lo que abrevió con capa. En banderillas estuvo efectivo y lucido Jorge Delijorge por lo que se desmonteró. Rodillas en tierra fue la manera de iniciar por alto, con un toro sin fuerza que a base de llevarlo siempre a la altura que pedía, le robó meritorios pases por el derecho mismos que trazó con lentitud, siguiendo con naturales a media altura y más por el derecho acortando la distancia, poniéndose a milímetros de la astifina cornamenta del negro meano, terminando el toro en tablas siendo en ese terreno donde le robó con la sarga más pases dándole los terrenos de adentro. Con determinación dejó una estocada hasta la empuñadura tendida que surtió efectos, teniendo solicitud de oreja que le fue otorgada.
MIGUEL AGUILAR (Grana y Oro)
Su primero fue “Andorrano”, con el que estuvo breve en capa, dando un buen puyazo Alfredo Ruiz “El Miura”. Con inteligencia con pases de tirón se llevó al toro a los medios, mismo que embistió sin ritmo y descompasado estando con enorme empeño, Miguel logrando meritorios pases por ambos lados, concluyendo con labor de aliño. Con determinación se fue tras el acero dejando una estocada entera tendida y un golpe recibiendo palmas y pitos el toro en el arrastre.
Con el cierra plaza de nombre “Abuelo”, de hinojos lo recibió con una larga cambiada, verónicas y chicuelina abrochando con media. Brindó al matador Antonio Ferrera para poner de esta manera toda la carne al asador, comenzando rodillas en tierra, siguiendo con series de enorme entrega y disposición, prosiguiendo con tandas diestra mano robándole prácticamente los pases al manso burel que canto la gallina, siendo la parte final sus pases dándole los terrenos de adentro. En la suerte suprema dejó una estocada poco caída para escuchar ovación que agradeció en el tercio; llegando de esta manera el término de este primer festejo mayor de la CXCVI Feria Nacional de San Marcos.
jacl
