
Eagle Pass, Texas.- El mayor de la ciudad de Eagle Pass, Rolando Salinas, dijo que el 90% de los indocumentados que ingresan a los Estados Unidos a través del río Bravo no califica para el asilo político, sin embargo el no detenerlos y deportarlos les facilita su estancia en el país.
“Lo correcto sería detenerlos y no liberarlos hasta que sean expulsados de Estados Unidos”.
El alcalde ha estado muy pendiente de la situación que enfrenta esta frontera, documentando y actualizándose de lo que se le informe por parte de las autoridades migratorias, quienes frontalmente se encuentran combatiendo la problemática a lo largo del río, el principal medio por donde entran los migrantes.
Y es precisamente por hacerlo de esta manera, que los indocumentados se enfrentan a su problema para poder calificar al asilo humanitario.
Todos ellos deben presentarse en los accesos a los puentes internacionales y pedir sean aceptados legalmente.
DGLJ