Saltillo, Coah.- Esta es la última semana del gobierno de Miguel Ángel Riquelme, una administración que tuvo que sobreponerse a varios retos, como los embates de la delincuencia organizada, los constantes recortes presupuestales y la pandemia del coronavirus.
Una de las preocupaciones que el Mandatario ha manifestado durante sus últimos eventos es el tema financiero, debido a que la entidad sufrirá un recorte de mil 300 millones de pesos en participaciones federales para el próximo año, lo que dificulta la transición.
El Gobernador aseguró que el pago de los préstamos a corto plazo está cubierto, pero que la administración entrante de Manolo Jiménez enfrentará el pago de aguinaldos y prestaciones.
A diferencia del tema financiero, la situación en seguridad en Coahuila tiene un mejor panorama. Este lunes Riquelme presidirá la ceremonia de graduación de los cadetes de la Policía Municipal de Torreón, una región que logró mantener segura, a pesar de los crecientes índices de homicidios dolosos en casi todo el país, según datos del propio Secretariado Ejecutivo de Seguridad Nacional.
En Saltillo y Piedras Negras, el Gobernador también entregará buenas cuentas en seguridad, debido a que, en la última medición del Inegi, ambas urbes tienen baja percepción de inseguridad.
Acabando el evento de los cadetes, el Gobernador presidirá el Subcomité Técnico de Salud de la Región Laguna, una estrategia de coordinación que funcionó para frenar los contagios y mejorar la atención a los pacientes con Covid-19.
Presidirá comités
La nostalgia se va a prolongar en su agenda del martes y miércoles, donde tiene reuniones relacionadas con la seguridad, el tema que más le interesa en el cierre de su Gobierno y por eso presidirá algunos comités para abordar los operativos de seguridad en la entrega-recepción, debido a que puede aprovecharse el cambio de Gobierno como pretexto del crimen para intentar ingresar a la entidad.
El jueves por la noche, el Gobernador tendrá una reunión privada en el Palacio de Gobierno para entregar legalmente el poder y develar el cuadro con su pintura en el Salón de los Gobernadores, sólo para esperar la hora del viernes en la que entregará protocolariamente el Gobierno en el Congreso del Estado.
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