
Saltillo, Coah.- La Procuraduría de los Niños, las Niñas y la Familia abrió una carpeta de investigación para conocer cómo fueron causadas las graves lesiones que padece un pequeñito de 3 meses, el cual se debate entre la vida y la muerte en un hospital privado.
El calvario para el pequeñito Oliver Damián comenzó el pasado 4 de noviembre, cuando durante su estancia en una guardería de la colonia 26 de Marzo sufrió una grave crisis convulsiva que lo dejó inconsciente.
Su maestra llamó a sus padres y estos optaron por trasladarlo de urgencia a la Clínica del Magisterio, siendo durante el trayecto cuando el menor sufre otra crisis convulsiva que obligó a los médicos a actuar de inmediato.
Los especialistas determinaron que las lesiones que presentaba Oliver requerían de aparatos especializados con los cuales no se cuenta en la clínica, por lo que decidieron transferirlo a un hospital privado al norte de Saltillo.
Luego de varios estudios, los médicos a cargo de la salud de Oliver, señalaron que el menor presenta al menos seis hematomas subdurales, por lo que se creyó que padecía alguna enfermedad sanguínea, situación que se descartó tras un análisis a su sangre.
Síndrome del niño maltratado
Por los indicios encontrados, Oliver fue diagnosticado con el síndrome del niño maltratado, situación que atrajo a las autoridades para tomar conocimiento y realizar las indagatorias correspondientes para determinar en qué entorno padece la violencia el menor.
Luego de las entrevistas recabadas en el círculo social, familiar y escolar del niño, se arrojó que los padres son ausentes y descuidados, por lo que además de una probable agresión en la guardería, también se tiene como sospechosos a sus progenitores.
Graves secuelas
Finalmente los especialistas concluyeron que Oliver presenta secuelas neurológicas, las cuales pueden ser permanentes, mismas que le ocasionarían la pérdida de la vista, e incluso lo podrían llevar a la muerte.