
En el evento estaban también diputados federales de Morena
Por: Ernesto Acosta Saltillo, Coah.- La visita de Alfonso Ramírez Cuéllar, dirigente nacional de Morena, terminó en gritos y acusaciones en su contra, además de una agresión física contra un militante, quien lo seí±aló de violador de la ley, espurio, corrupto, sinvergí¼enza, prepotente y falso. Al terminar la conferencia de prensa, donde Ramírez Cuéllar evadió preguntas sobre la inseguridad creciente en el país y el descontrol en la pandemia.
Mientras se retiraba del lugar, un restaurante al norte de la ciudad, el militante Antonio Ramos Salas increpó al líder nacional, quien lo evadió y siguió de frente. Luego, Ariel Maldonado Leza se frenó y encaró al militante a quien golpeó en la cara con la mano derecha.
José Angel Pérez Hernández, diputado federal, se interpuso para evitar mayor agresión.
Gloria Vitela, titular de la Unidad de Transparencia del Comité Estatal de Morena, aseguró que José Guadalupe Céspedes Casas, es legalmente el presidente en funciones del partido.
Hortensia Sánchez Galván, solo fue designada como delegada nacional en Coahuila exclusivamente para atender asuntos electorales, más no para asumir la dirigencia del partido. Céspedes Casas ni siquiera fue invitado a la rueda de prensa, la que presidió Sánchez Galván.
Ramos Salas, argumentó que, de acuerdo con los Estatutos (Artículo 32), Céspedes Casas, como secretario general, asumió la presidencia, ante la renuncia de Miroslava Sánchez Galván, quien impuso a su hermana para controlar al partido, no obstante que la mayoría de los militantes están en desacuerdo.