Aislinn Derbez revela fotos con sobrepeso; defiende su cuerpo

Aislinn Derbez, rompió el silencio y habló sobre lo difí­cil que fue tener unos kilos de más.

Por: Grupo Zócalo

Ciudad de México.- Aislinn Derbez, actriz e hija de Eugenio Derbez, rompió el silencio y habló sobre el difí­cil proceso que enfrentó cuando subió de peso, luego de que en redes sociales la criticaran por mostrar su nueva figura -atlética- en bikini. Así­ se defendió de las crí­ticas.

A través de Instagram, la famosa actriz compartió una serie de imágenes en donde se dejó ver con unos kilos de más tras haber dado a luz a Kailani, la hija que tuvo con Mauricio Ochmann. Junto a éstas, expresó que fue impaciente, dura y poco amorosa con su cuerpo, pues no se sentí­a a gusto.

“Para mí­ los últimos 2 aí±os han sido un viaje de cambios drásticos en ese aspecto. Nunca me habí­a preocupado por tener que hacer dieta o ejercicio, ya que tengo una genética muy privilegiada. Después de parir subí­ de peso por retención de lí­quidos y desbalances hormonales. Y tener que lidiar con un cuerpo con el que no me sentí­a cómoda era algo completamente desconocido para mí­â€, comentó.

Sin embargo, conforme pasó el tiempo se dio cuenta que gracias a su cuerpo con aumento de peso pudo tener a su hija. Explicó que con ejercicio y con la ruptura de su matrimonio, comenzó a bajar rápidamente.

“Luego, contrariamente, hace 6 meses con el duelo de la separación, mi cuerpo lo resintió y comenzó a perder peso rápidamente”, contó.

Por ello, Aislinn Derbez reiteró que lo que opinen de su cuerpo la tiene sin cuidado, pues lo más importante es lo que su cuerpo comunica y cómo aprende a leerlo.

“El que opinen cosas buenas o malas sobre mi cuerpo es lo de menos. Pero creo que es importante poder escuchar cómo es que el cuerpo se comunica con nosotros. Para mí­ aprender a leerlo fue de mis mejores herramientas para comprender qué estaba sucediendo a nivel interno en ciertos momentos. Creo que una vez que comenzamos a escuchar a nuestro cuerpo, aprendemos cómo tratarlo. Tristemente estamos acostumbrados a ver el cuerpo como un objeto y no nos detenemos a comprender su lenguaje, sus ritmos y sus necesidades reales…”, apuntó.