Almacenar productos de limpieza bajo llave ayuda a evitar intoxicaciones

Seguro Social exhorta a madres y padres de familia a extremar medidas de precaución para proteger a los menores

Por: Edmundo Garza Lara Piedras Negras.-Productos cáusticos como sosa, detergentes, pilas, quitamanchas, destapa caí±os, entre otros, son compuestos quí­micos corrosivos que si son ingeridos accidentalmente pueden provocar lesión en los tejidos del tubo digestivo, por lo que el Seguro Social exhorta a las madres y padres de familia a extremar medidas de precaución para proteger la integridad de las y los menores. La población menor de tres aí±os suele ser la más afectada y los lugares de casa en donde más intoxicaciones acontecen son la cocina, el baí±o, la recámara y la lavanderí­a. Un correcto resguardo y almacenamiento previenen estos percances que en su mayorí­a ocurren en el hogar, explicó la especialista en pediatrí­a Daniela Bení­tez Guerra. Recomienda colocar en gavetas con candado los productos para la limpieza del hogar, venenos y medicamentos. También se debe evitar depositarlos en envases de agua o refresco que sean llamativos para las nií±as y nií±os, y enseí±arlos a no tomar medicamentos sin la supervisión de un adulto. En caso de ocurrir una intoxicación se debe acudir de inmediato a los servicios de salud y no provocar el vómito, ni realizar maniobras en casa, ya que ello sólo consume tiempo vital para la atención del paciente. Tomar acciones para tratar de que expulse la sustancia, en ocasiones resulta contraproducente porque algunos quí­micos generan quemaduras en su paso por el organismo. Los daí±os ocasionados se producen en forma inmediata y afectan cara, labios, boca, esófago, estómago e intestinos. Entre los sí­ntomas que se pueden presentar están: dificultad para deglutir, salivación, vómito, dolor en el pecho y abdomen. La causa de que los infantes sean vulnerables a estos accidentes, se debe a la curiosidad para conocer todo aquello que les rodea, ya sea manipulándolo o llevándoselo a la boca, porque no conocen el peligro y por el descuido de adultos al colocarlos en envases inseguros no propicios, como los de refresco.