
El policía de Fuerza Coahuila no respetó el semáforo en rojo.
Por: Alexis Massieu
Monclova, Coah.- Cuatro policías lesionados y dos patrullas: Fuerza Coahuila y Seguridad Pública de Frontera destrozadas, dejó el encontronazo provocado por la falta de precaución del conductor de la unidad estatal al no respetar el semáforo en rojo del cruce de Madero y Pape.
El fuerte accidente vial ocurrió a las 19:20 horas, cuando una patrulla de la Policía Municipal de Frontera, la número 1034, conducida por ídgar Hernández Flores, escolta del subdirector, José Ramón García, circulaba por el bulevar Madero en los carriles del norte y sobre el Pape iba la unidad de Fuerza Coahuila, de sur a norte.
Según el peritaje realizado por autoridades municipales, el conductor de la unidad de Fuerza Coahuila no respetó el semáforo en rojo y fue impactado por la patrulla de Ciudad Frontera.
Tras el encontronazo, Hernández Flores quedó prensado, mientras los policías estatales quedaron esparcidos sobre el pavimento.
Los heridos tuvieron que esperar más de 20 minutos para ser atendidos por la tardanza de las ambulancias de Cruz Roja y Bomberos.
âVUELANâ ARMAS Y CASQUILLOS
El percance, además de dejar dos patrullas deshechas, paralizó la vialidad y se dijo extraoficialmente que las patrullas se dirigían al lugar de un reporte que activó el Código Rojo, sin dar más detalles.
En cuanto al estado de salud de los dos policías que fueron llevados de emergencia a un hospital, su diagnóstico fue reservado, pero se dijo de forma preliminar que no estaba en riesgo su vida.
De igual forma, tampoco se aclaró por parte de las autoridades cuál de las dos patrullas era la responsable de causar el accidente, en donde una de ellas se pasó el semáforo en rojo, y si ambas o ninguna llevaban las torretas y sirena encendidas.
ARMAS ASEGURADAS
Además de las patrullas, la Policía Municipal local aseguró algunas armas que llevaba consigo el oficial que manejaba la patrulla de Ciudad Frontera, lo cual generó inconformidad y molestia en los agentes de la Ciudad Rielera, que reclamaron el proceder a sus similares de la Capital del Acero.
Testigos indicaron que tras el accidente, armas que iban en la parte de atrás de la camioneta de la Policía Municipal, salieron volando y quedaron tiradas en la calle, al grado que un mariachi pensó en levantarlas y otros ciudadanos lo detuvieron.
En esa versión no oficial, se aseguró que eran varias las armas que traía la patrulla en la caja, y hasta casquillos usados salieron volando, mostrando uno a las cámaras de Zócalo.
Finalmente, los oficiales de Ciudad Frontera reconocieron que se habían exasperado por la situación y se disculparon con el Jurídico de la Preventiva monclovense, respetando el proceder de sus elementos al asegurar las armas, cuando no había siquiera al momento del percance un policía fronterense que pudiera resguardarlas.