
Podría restituirse el arancel al acero asiático.
Por Alberto Rojas
Monclova, Coah.- El presidente Andrés Manuel López Obrador frenó el despido masivo en AHMSA al anunciar ayer su respaldo a la industria siderúrgica nacional, luego de tres estresantes semanas donde la desactivación de impuestos arancelarios desde el 1 de febrero contra acero importado colocó a la acerera monclovense en situación de alto riesgo de supervivencia.
Luis Zamudio Miechielsen, director general de AHMSA, confirmó que se desinfló el peligro de eliminación de 2 mil plazas laborales luego del mensaje de López Obrador de proteger las acerías mexicanas atrapadas, dijo, por una âtormenta perfectaâ; por un lado por falta de aranceles a China y por el otro la aplicación arancelaria de Estados Unidos a México.
A inicios de la próxima semana, se prevé que la secretaria de Economía, Graciela Márquez informe la fecha en que se reactivará el arancel que el empresariado pide sea de 25 por ciento y no 15 por ciento contra todas las fracciones arancelarias proveniente de países con los cuales México no tiene tratado de libre comercio, e igual porcentaje al acero estadounidense.
En su mensaje de oxigenación, López Obrador expresó: âtenemos que apoyar a la industria textil nacional, al mercado interno, a la industria del calzado, y tenemos que apoyar también a las industrias que se dedican a la producción de aceroâ.
âNo estamos de acuerdo con lo que se hizo en el período neoliberal donde se llevó a cabo una apertura indiscriminada y sin límites y se dejó en estado de indefensión a los productores nacionales, entonces vamos a revisar este caso, siempre pensando en proteger a la industria nacional a la cual se le trató muy malâ, enfatizó el Jefe del Ejecutivo Federal.
TERMINA ANGUSTIA EN ALTOS HORNOS
Tres semanas con tensos capítulos de estrés, miedo y nerviosismo se disiparon ayer al recibir el gigante de acero Altos Hornos de México una bocanada de oxígeno luego que el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció su respaldo a la industria siderúrgica nacional que estaba al borde del colapso tras la desactivación de la salvaguarda el pasado 31 de enero.
Es una vacuna y vitaminada para la desfallecida industria siderúrgica nacional que enfrentaba diagnóstico terrible en medio de las primeras contracciones después que la Secretaría de Economía puso en pausa la aplicación de 15 por ciento de impuestos arancelarios a importaciones de acero proveniente de países con los que no hay tratado de libre comercio.
La avalancha de acero principalmente chino y otros países asiáticos ingresando al mercado nacional en condiciones de prácticas desleales con precios inferiores a los reales, había colocado al coloso contra las cuerdas, casi de rodillas.
La comunidad sufría escalofrío ante un eventual escenario de probable parcial desaparición de la industria siderúrgica mexicana y en el caso local la economía con alto riesgo de ser reducida a cenizas con interminable cementerio de plazas laborales.
Ese cuadro desapareció desde ayer tras el anuncio de López Obrador, y ahora empleados, proveedores, técnicos, sindicalizados y la comunidad en general, literal, limpian las gruesas gotas de sudor que perlaban sus frentes provocadas por la incertidumbre en la fuente laboral.
Máximo Vedoya, presidente de la Cámara Nacional de la Industria del Hierro y del Acero, expresó lo siguiente tras al anuncio la maí±ana de ayer del Presidente de México; âmuy acertadas las palabras de López Obrador de hoy; una industria sólida y dinámica es la base para el desarrollo de nuestro paísâ.
âQueremos y sabemos competir, pero en condiciones justas por eso invertimos y trabajamos para hacer acero mexicano y de la mejor calidadâ, aí±ade el empresario argentino nacionalizado mexicano y titular de Ternium.
A su vez, la Secretaría de Economía difundió un comunicado que dice; âderivado de las reuniones sostenidas con industrias del acero, textil y calzado se revisan alternativas para apoyar a la industria nacional sin descuidar el mercado interno, las cadenas productivas, la competitividad y el bienestar de consumidores mexicanosâ.
Todavía a temprana hora de ayer, miedo, angustia y nerviosismo se respiraba en Altos Hornos de México con afectación entre empleados y obreros, pero unas declaraciones a medios nacionales del senador Armando Guadiana donde pronosticaba que los aranceles serían restaurados entre lunes y martes de la próxima semana, prendió el ánimo.
Minutos más tarde, imágenes de López Obrador anunciando el respaldo de su gobierno a la industria siderúrgica nacional, además al sector textil y del calzado, provocó júbilo, alegría y optimismo en Monclova-Frontera y el resto de la entidad donde hay actividad minero siderúrgica.
Guadiana iluminó la oscuridad derivada de ausencia informativa, al establecer a temprana hora de ayer que a más tardar el próximo martes 26 de febrero la Secretaría de Economía a cargo de Graciela Márquez Colín reactivará la salvaguarda contra la competencia desleal de países sin tratado de libre comercio con México, principalmente China.-
âYa logramos un compromiso del Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, para que el lunes o martes de la próxima semana se reactive este arancelâ, afirmó el senador y empresario minero, y aí±adía que el presidente entendió perfectamente del riesgo para los empleos del sector siderúrgico por lo que dará instrucciones a la Secretaria de Economía, Graciela Márquez, para que vuelva a operar la medida de salvaguarda.
El pasado 31 de enero venció la salvaguarda temporal con la que desde octubre del 2015 el Gobierno mexicano imponía un arancel de 15 por ciento contra las importaciones de acero en lámina y placa provenientes de países sin tratado de libre comercio, como China, Rusia, Turquía, Vietnam y Corea del Sur.
Pero la Secretaría de Economía dejó sin renovar la medida a pesar de las peticiones del sector siderúrgico, y entonces todo era hermetismo y parecía que los directivos de Altos Hornos de México con papel y lápiz de un momento a otro calcularían cuántos y quiénes causarían baja del complejo siderúrgico y en los yacimientos de mineral de carbón y fierro.
Pese a que se miraba borroso el escenario, nunca se contemplaron bloqueos de puentes internacionales y carreteras federales como acciones de presión para restablecer aranceles al acero importado.
No obstante el complicado escenario por eliminación de aranceles contra acero importado, líderes del Sindicato Minero Democrático a cargo de Ismael Leija Escalante nunca pintaron su raya ante el Gobierno Federal, ellos veían una tenue flama de esperanza, que finalmente alumbró ayer con intensidad tras al anuncio de Andrés Manuel López Obrador en su diaria conferencia matutina.
En el verano de 2015 los sindicalizados de Altos Hornos de México evaluaron las alternativas de bloqueos en los puentes internacionales de Piedras Negras con Eagle Pass, Texas, y Ciudad Acuí±a con Del Río, Texas, en el marco de una asamblea general extraordinaria efectuada el 27 de junio de aí±o, pero ahora no fue así.
La comunidad de múltiples regiones de Coahuila sufrieron escalofrío al presentir un eventual apocalipsis donde supuestamente serían apagados los departamentos de proceso primario, y en AHMSA 2 la única zona de producto terminado es Laminación en Frío, mientras que en AHMSA 1, Laminación en Frío, Laminación en Caliente, Molino Steckel y Planta de Normalizado.
Y es que en el laberinto donde buscaba una urgente salida en 2015, Altos Hornos de México puso en la mesa de decisiones eliminar la producción primaria y comprar planchón importado en lugar de producirlo lo que aunque suene a pesadilla convertiría en futuros museos las minas de carbón y fierro, Peletizadora, Alto Horno, Peletizadora, BOF- Colada Continua.
Rezos, plegarias, misas precedieron a la protesta de junio de 2015 consistente en multitudinaria marcha efectuada tres días después de esa asamblea donde alrededor de 25 mil monclovenses exigieron al entonces gobierno de Enrique Peí±a Nieto, impuestos contra la avalancha de acero chino ingresado en condiciones de prácticas desleales de comercio.
Cuatro meses después, la Secretaría de Economía que estaba a cargo de Ildefonso Guajardo decretó el ansiado arancel con una tasa de 15 por ciento a las importaciones principalmente china de lámina rolada en caliente, planchón, placa y lámina rolada en frío, lo que representó una bocanada de oxígeno para la entonces moribunda Altos Hornos de México.
El pasado 8 de febrero, los capitanes de la industria siderúrgica mexicana incluyendo los mandos de Altos Hornos de México se entrevistaron en la Ciudad de México con la Secretaria de Economía, Graciela Márquez para abordar el tema de la urgente restitución de los aranceles.
Pero en esa ocasión la Secretaria de Economía, Graciela Márquez ni siquiera recetó aspirinas al sector siderúrgico para combatir el cáncer de importaciones de acero barato chino que hoy, sigue compitiendo deslealmente en México, y por eso la acerera sofistica su producción para escapar del acecho asiático.
Los precios del acero en picada, AHMSA también, por lo que se accionaron las sirenas de alarma y el nerviosismo se estacionó en las oficinas generales de la firma que preside Alonso Ancira y que dirige Luis Zamudio.
La esencia del problema, reiteran fuentes, es que China está produciendo alrededor de 800 millones de toneladas de acero por aí±o y dada la importante caída de su crecimiento, sólo consume 400 millonesâ.
China está colocando en el mercado internacional los otros 400 millones de toneladas a cualquier precio, a como caiga, aún por debajo del costo. En junio de 2015, los chinos vendían planchón, materia prima de los procesos de laminación, entre 290 y 300 dólares la tonelada, cuando el precio de la chatarra -materia prima para la fabricación del planchón estaba en 280 dólares, prueba de que no representaban ni los costos de producción
El 25 de junio de 2015, el presidente de AHMSA, Alonso Ancira Elizondo, advirtió en rueda de prensa que si a partir de la tercera semana de julio el secretario de Economía, Ildefonso Guajardo, no detenía las importaciones ilegales de acero principalmente de China, su empresa aplicaría un segundo despido masivo inmediato de 4 mil 056 trabajadores. Efectivamente el despido masivo se produjo y se incrementó hasta más de 4 mil 600 con la salida en enero de 2016 de cientos de empleados de confianza.
La historia se repitió el anterior 6 de febrero cuando Alonso Ancira, presidente de Altos Hornos de México dijo que congeló una inversión por 200 millones de dólares y que analiza ajustes en la producción y cancelación de 10 por ciento de su plantilla laboral, equivalente a aproximadamente 2 mil trabajadores, de no resolverse la problemática de los aranceles al acero.
Indicaba que la industria siderúrgica mexicana requiere con urgencia una política arancelaria de largo plazo, que evite el riesgo de sumir al sector en una contracción que afectará a toda la cadena productiva.
Ante medios monclovenses congregados en la Sala de Juntas de la empresa, Alonso Ancira afirmaba que el 15 por ciento que estableció en su momento la Secretaría de Economía resultó tibio frente a la magnitud del problema que se vivía, pero la situación se agravó con la salvaguarda de 25 por ciento que desde el 1 de junio de 2018 estableció Estados Unidos para los productos mexicanos.
Pese a lo anterior, decía, âMéxico no aplica respuesta recíproca contra la industria siderúrgica estadounidense por lo que ahora sin ningún arancel contra acero chino la realidad es severamente críticaâ.
El empresario reveló que dejó de ingresar alrededor de 250 millones de dólares por las menores exportaciones directas a indirectas a Estados Unidos y que de no resolverse la problemática actual, en AHMSA se hará necesario un ajuste en los planes de producción.
âEl Gobierno Federal actual ha venido tomando medidas adecuadas para ordenar al país en muchos aspectos, y confiamos que en este caso se adoptarán las acciones necesarias para proteger a la industria nacional y ponernos en condiciones de igualdad con nuestros competidoresâ, puntualizó.
âPrecisó que además de establecer una salvaguarda de 25 por ciento frente a todos los países sin tratado comercial y Estados Unidos, esta debe comprender toda la gama de productos y no solamente una parte, como ocurrió con el arancel que rigió hasta finales de eneroâ..
âResulta que por esa barrera nosotros ni nuestros clientes hemos podido exportar hacia el mercado norteamericano, y las exportaciones de ellos a México han crecido; es necesario ponernos en iguales condiciones para poder negociar, dado que en la actual situación, por ejemplo, incluso está en riesgo la firma del nuevo tratado comercialâ, dijo.
El martes un rayo de esperanza alumbró el entorno cuando Ismael Leija Escalante, líder del Sindicato Minero Democrático entregó un documento manuscrito en Saltillo al Presidente Andrés Manuel López Obrador y en segundos pidió su apoyo para los empleos mineros y siderúrgicos pues se acercaba un tsunami de efectos catastróficos.
Lo anterior en caso de no ser restaurados los aranceles contra el acero chino, ya no en 15 por ciento como regía desde octubre de 2015 y renovado en automático semestralmente, sino de 25 por ciento, y además medidas espejo contra las importaciones provenientes de Estados Unidos.
Esto último, luego que desde el 1 de junio de 2018 el presidente estadounidense Donald Trump aplica aranceles de 25 por ciento contra el acero mexicano, no obstante el tratado de libre comercio, por lo que se demanda medidas recíprocas del gobierno mexicano.
Las acciones arancelarias de Estados Unidos contra México ha provocado afectación en Altos Hornos de México por 250 millones de dólares que han dejado de ingresar por sus ventas directas e indirectas. A inicios de mes, los clientes le adeudaban 100 millones de dólares al quedar atrapados también en la crisis.
Parecía que Altos Hornos de México había entrado a un campo minado; otro susto más para la familia siderúrgica.