
Durante su intervención frente a la ONU, Donald Trump aseguró que no descarta la opción militar en Venezuela. Esto fue respondido con una invitación a dialogar por parte de Nicolás Maduro.
Por: AFP
Nueva York, NY.-Â El presidente estadunidense, Donald Trump, aseguró en la ONU que no descarta la opción militar en Venezuela, pero horas después, en el mismo sitio, su homólogo venezolano Nicolás Maduro, le pidió una reunión y dijo que quiere estrecharle la mano.
âYo estaría dispuesto a estrechar la mano del Presidente de Estados Unidos y a sentarme a dialogar sobre los asuntos de las diferencias bilaterales y los asuntos de nuestra regiónâ, dijo Maduro ante la Asamblea General de la ONU, en un discurso de 49 minutos en el que condenó âla agresión permanenteâ de Washington y fustigó al imperialismo y al capitalismo.
Maduro dijo a los líderes, ministros y embajadores de 130 países que le separan de Trump âinmensas diferencias históricas, ideológicas y sociales. Yo soy un obrero, un conductor de autobús, un hombre del pueblo, no soy un magnate.
âHa dicho el presidente Donald Trump que está preocupado por Venezuela, que quiere ayudar a Venezuela. Bueno, yo estoy dispuesto a hablar con agenda abierta de todos los temas que quiera hablar el gobierno de Estados Unidosâ, insistió el cuestionado gobernante, denunciado ante la Corte Penal Internacional este miércoles por seis países de las Américas.
Maduro fue el primero que lanzó la idea de un encuentro con Trump desde Caracas. Consultado al respecto, Trump dijo ayer que âestaría dispuestoâ si Maduro lo desea, aunque aclaró que no está en su agenda.
Trump sostuvo en la ONU que no descarta una opción âfuerteâ en Venezuela y que Maduro podría ser derrocado ârápidamenteâ si los militares venezolanos así se lo propusieran. También anunció sanciones contra su esposa Cilia Flores y tres de sus más estrechos colaboradores.
âY ya saben lo que quiero decir con fuerteâ, indicó el jefe de la Casa Blanca en referencia tácita a una intervención militar.
Acusa a Pekín
Por otro lado, Trump admitió que el mandatario chino Xi Jinping, quizás ya no es su amigo, tras acusar a Pekín de interferir en la política estadunidense y de buscar su derrota en las elecciones debido a su postura dura sobre el comercio, acusación que China rechazó de inmediato.
Las dos primeras economías mundiales se han involucrado en una escalada de aranceles desencadenada por Trump, que pidió una mayor apertura del mercado chino hacia uno âMade in the USAâ.
âLamentablemente nos enteramos de que China ha estado intentando interferir contra mi gobierno en nuestra próxima elección de 2018 que tendrá lugar en noviembreâ, dijo ante el Consejo de Seguridad de la ONU.
âNo quieren que yo o que nosotros ganemos porque soy el primer presidente que desafía a China en comercioâ, aí±adió.
Afirmó que había evidencia clara para respaldar sus acusaciones.
âChina siempre ha respetado el principio de no injerencia en los asuntos internos de un paísâ, dijo por su parte el jefe de la diplomacia de China, Wang Yi.
âSe ríen conmigoâ
Trump también aseguró que los dirigentes que asistieron a su discurso el martes se rieron con él, y no de él.
âDije que nuestro país era más fuerte que nunca y es verdad. Escuché risas y reaccioné diciendo que no esperaba esa reacción. Y nos reímos juntosâ.
Encabeza Francia esfuerzo climático
Después de París, Bonn y San Francisco, fue el turno de Nueva York: líderes mundiales se reunieron por invitación de Emmanuel Macron para ârendir cuentasâ y tratar de dar oxígeno al acuerdo de París sobre el clima frente a la pasividad de muchos estados.
El aí±o pasado, el presidente francés había advertido durante la primera edición de la reunión One Planet Summit, en París, que la batalla se estaba perdiendo.
âNecesitamos reasignar un tercio de las finanzas globales a nuevas acciones climáticasâ, dijo Macron. (AFP)