Seí±ala la viuda Elizabeth Castillo.
Por: Elvia Zamora Manrique
Sabinas, Coah.-Â Luego de que trascendiera el interés de las viudas de Pasta de Conchos por acudir a la Ciudad de México para sostener una reunión con el senador Napoleón Gómez Urrutia, los deudos han sido âatacadosâ en redes sociales por la activista Cristina Auerbach, quien desde el 2008 se presentó en la mina 8 prometiendo apoyar el rescate y luchar por la causa.
âEsa mujer solo ha lucrado con la desgracia de nosotros y lo sigue haciendo, que se quite la careta y hable de frente, ella anda en México según por nosotros y no aparecemos como viudas en ningún lado, son otros nombres, puro beneficio propio, es de lo que vive, del dolor que sentimos las familias de Pasta de Conchosâ, dijo Elizabeth Castillo Rábago, viuda de Gil Rico.
Molesta por los comentarios que ha hecho sobre su persona y otro grupo de mujeres que desean dialogar con âNapoâ, dejó en claro que ella no tiene nada que ver con la situación que se vive, âno es una viuda, no siente el dolor y por lo tanto no puede defender nada al menos de que esté recibiendo un beneficio económico, porque de ella nosotros no hemos visto nada a favorâ, reiteró.
Recordó que la activista arribó a la mina en el 2008, dos aí±os después de la tragedia, exigiendo hacer desmanes contra la empresa y diversas autoridades, pero jamás fue partícipe de las reuniones y acciones emprendidas por las viudas y el sindicato minero.
âYo soy verdaderamente una viuda, ella solo se hace pasar como tal, lo que diga no cuenta, en lugar de mostrar apoyo busca alejarnos más al querer echarme al pueblo encima, si algo me llega a pasar hago totalmente responsable a esta persona que jamás ha cumplido con lo que prometió, no logró mejorar pensiones, no logró becas, ni siquiera cuando nos animamos a hacer el rescate pudo conseguirnos un par de botasâ, dijo Castillo Rábago.
Finalmente la entrevistada aseguró que no tiene poder alguno o nexo para que tome decisiones a nombre de la familia Pasta de Conchos, âella opina, ordena y maneja a cierta gente, desde México, porque cuando viene para la región se esconde, que quede claro que no es nadie, ni perdió a nadie en la explosión ni puede decidir por nosotrasâ, culminó.
