La ciudad quería dormirlo por considerarlo altamente agresivo, debido a que atacó a una mascota pequeí±a
Por: Eleazar Ibarra
Autoridades municipales encabezadas por la gerencia interina y del departamento de Control Animal, solucionaron un caso y determinaron no sacrificar a un perro de la raza Pitbul que había sido asegurado por atacar a una mascota menor, en un hecho que se dio entre vecinos dentro de los límites de la ciudad.
Surgió hace más de 15 días cuando el animal fue recogido por personal de la perrera porque consideraron que su agresividad era evidente con el sólo realizar ese ataque.
La ciudad había determinado ponerlo en resguardo 10 días que se transformaron en 15 al grado tal de que al acudir el dueí±o a reclamarlo, le informaron que su mascota sería sacrificada.
Buscó la intervención de la fundación Budy y su personal acudió a ver al perro âle dimos de comer, lo tocamos y no pudimos confirmar su agresividadâ, dijo la seí±ora Nina Cobo.
Hubo ciertas contradicciones entre ella y representantes del departamento de Control Animal quienes inclusive le aseguraron que âaunque venga Trump no le vamos a hacer caso y vamos a matar al perroâ.
Luego de una hora de discutir la mascota, llegaron al acuerdo de que le será liberada a su dueí±o pero con las condiciones de que sea castrado, cumpla con las vacunas, tenga entrenamiento adecuado, aseguranza y una jaula adecuada para que se mantenga en vigilancia, además de pagar una multa de 200 dólares.
La fundación Budy pudo constatar que la herida ala mascota fue sanada. Se habló con los dueí±os así como del perro agresor y ambos coincidieron en que no era viable el sacrificio