
El presidente Donald Trump dijo este viernes que Estados Unidos ya perdió cualquier guerra comercial, al defender su propuesta.
Por Agencias
Ciudad de México.- El presidente Donald Trump dijo este viernes que Estados Unidos ya perdió cualquier guerra comercial, al defender su propuesta de aplicar más aranceles a los bienes chinos y afirmar que la decisión podría causar "un poco de daí±o", pero que el país estadounidense estaría mejor a la larga.
"Ya hemos perdido la guerra comercial. No tenemos una guerra comercial, hemos perdido la guerra comercial", sostuvo Trump en una entrevista con el programa "Bernie & Sid", de la radio 77 WABC.
"No estoy diciendo que no causará un poco de daí±o, pero el mercado ha subido 40 ó 42 por ciento, así que podríamos perder un poco de eso. Pero vamos a tener un país mucho más fuerte cuando esto termine", declaró el mandatario estadounidense.
"De modo que podríamos asumir la pérdida ahora y finalmente saldremos fortalecidos de esto", agregó.
China contraataca
China advirtió este viernes 6 de abril que contraatacará "contundentemente" ante las medidas arancelarias de Estados Unidos y aseguró que está preparada para pagar el precio de una guerra comercial que, aunque no desea, no tiene miedo a ella.
"Si Estados Unidos persiste en su comportamiento de unilateralismo y proteccionismo comercial, ignorando la oposición de China y de la comunidad internacional, China va a seguir hasta el final a cualquier precio y contraatacará contundentemente", aseguró el Ministerio de Comercio chino en un comunicado.
Las autoridades chinas respondieron así a las amenazas del presidente estadunidense Donald Trump, que este jueves 5 de abril anunció que había instruido a los funcionarios de Comercio que consideren aranceles adicionales por 100,000 millones de dólares en contra China, lo que avivó una posible guerra comercial entre las dos potencias económicas.
Trump dijo en un comunicado que los aranceles adicionales se están considerando "a la luz de la represalia injusta de China" contra las acciones comerciales previas de Washington, que incluyeron tarifas de 50.000 millones de dólares sobre productos chinos.