El resto del esqueleto yace aún en el cenote y se planea continuar con su colecta y estudio en 2018
Por: Agencias
Ciudad de México.-El fondo de un profundo cenote, en medio de las hoy paradisíacas playas caribeí±as de México, fue la tumba de un perezoso gigante que vivió unos 10 mil aí±os antes de la era cristiana, cuyo descubrimiento fue anunciado este miércoles por científicos mexicanos.
La nueva especie recibió el nombre científico de Xibalbaonyx oviceps, en alusión a la palabra maya Xibalba que refiere al inframundo, representado por las cuevas donde fueron hallados los restos, así como al griego onyx, por sus garras, y al latín ovum, pues la forma de su cráneo es similar a un huevo.
Los restos fueron descubiertos en 2010 por el explorador de cuevas Vicente Fito, en el cenote llamado Zapote, dentro de un área conocida como la Ruta de los Cenotes, indicó un comunicado del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
"El esqueleto se encuentra casi completo, distribuido entre 50 y 55 metros de profundidad, por lo que se cree que el animal cayó cuando el cenote se encontraba seco, o posiblemente con un poco de agua a mayor profundidad", detalló el INAH.
Los cenotes son depósitos subterráneos de agua manantial, ubicados en Yucatán y Quintana Roo y en otras partes de América.
El cráneo y la mandíbula del perezoso, así como nueve vértebras, tres huesos largos, tres costillas y siete garras fueron colectados en 2014, como parte de un rescate dirigido por la arqueóloga del INAH Carmen Rojas Sandoval.
El resto del esqueleto yace aún en el cenote y se planea continuar con su colecta y estudio en 2018, informó la institución.
Los restos del perezoso, bautizado como Pote, fueron sometidos a un tratamiento de conservación para deshidratar los huesos que duró dos aí±os y que requirió condiciones de humedad, luz y temperatura controladas las 24 horas del día.
"Los primeros fechamientos arrojan una antigí¼edad de entre 10 mil 647 y 10 mil 305" aí±os antes de la era cristiana, agregó el INAH.
Los perezosos gigantes han sido ampliamente documentados en Sudamérica, desde donde migraron hacia Norteamérica hace nueve millones de aí±os, aunque las rutas y relaciones evolutivas de la especie entre Norte y Sudamérica aún son poco entendidas, así como los eventuales hábitats y las barreras geográficas.
Entre Tulum y Playa del Carmen se ubican los tres sistemas de cuevas sumergidas más extensos del mundo, considerados "la meca del espeleobuceo" ya que a finales del Pleistoceno el nivel del mar era unos 60 metros menor que el actual, destacó el INAH.