En una publicación del Astronomical Journal se indicó que dicho objeto se encuentra supuestamente en los confines exteriores
Por: Agencias
Ciudad de México.-Â Investigadores del Laboratorio Lunar y Planetario de la Universidad de Arizona descubrieron la presencia de una masa planetaria desconocida ubicada dentro del Cinturón de Kuiper y más cercano al Sol que la órbita de Plutón, el conocido como ânoveno planetaâ.
En una publicación del Astronomical Journal se indicó que dicho objeto se encuentra supuestamente en los confines exteriores del Sistema Solar cerca de donde inicia una población de rocas espaciales que orbitan el sistema, llamadas KBOs.
Las investigaciones estuvieron lideradas por el científico Kathryn Volk. La mayoría de los KBO orbitan al Sol con inclinaciones que se aproximan a lo que los científicos llaman el âplano invariableâ del sistema, el más distante al Sol. La inclinación de cerca de 600 rocas del cinturón de Kuiper habrían tenido una inclinación similar hacia dicha masa. Por así decirlo, la presencia de esta masa planetaria habría deformado el Cinturón de Kuiper, lo que llamó la atención de los investigadores.
âImagina que tienes muchos pedazos pequeí±os de roca flotando y a cada uno le das un espacio para girar. Si tú los miras, observarás que todos tienen inclinaciones y velocidades diferentes al girar, pero había un número de ellos con una orientación similar hacia un punto gravitacional que parecía atraerlosâ, dijo Renu Malhotra, profesor e investigador de ciencias planetarias en LPL.
El cinturón inicia muy cerca de la órbita de Neptuno y por algunos cientos de Unidades Astronómicas o AUs, cuyo valor representa la distancia entre la Tierra y el Sol. La masa desconocida se habría encontrado cercana a la órbita de dicho planeta.
âLa única explicación que podemos dar ahora es que hay una masa planetaria que nunca antes habíamos visto. Según nuestros cálculos una masa similar a la de Marte es la que se requiere para generar el desequilibrio (en el cinturón de Kuiper) que detectamosâ, dijo.
Los investigadores observarán cerca de 40 mil rocas del cinturón de Kuiper para determinar si existe una constante en los cuerpos rocosos que rodean a la masa encontrada, para saber si se podría hablar de un nuevo planeta enano.
